NICOSIA, Chipre — La situación en Siria se debe revaluar a fin de permitir el regreso voluntario de refugiados sirios a su lugar de origen, señalaron ocho Estados miembros de la Unión Europea.
En un comunicado conjunto emitido el viernes, funcionarios de Austria, República Checa, Chipre, Dinamarca, Grecia, Italia, Malta y Polonia dijeron estar de acuerdo en una reevaluación que produzca “maneras más efectivas de manejar” a los refugiados sirios que tratan de llegar a países de la Unión Europea.
Los ocho países, que sostuvieron conversaciones durante una cumbre en la capital chipriota, subrayaron que la situación en Siria “ha evolucionado considerablemente”, aun cuando no se ha alcanzado una estabilidad política completa.
En los últimos meses, Chipre ha recibido una oleada de refugiados sirios que han llegado a la nación isleña, principalmente desde Líbano, a bordo de frágiles embarcaciones.
A principios de este mes, la Unión Europea anunció un paquete de ayuda por 1.000 millones de euros (1.600 millones de dólares) con el objetivo de reforzar los controles fronterizos para detener el flujo de buscadores de asilo y migrantes en Chipre e Italia.
Los ocho países afirmaron que la Unión Europea debe aumentar el apoyo a Líbano para “mitigar el riesgo de flujos aún mayores desde Líbano hasta la UE”.
“Las decisiones sobre quién tiene derecho a cruzar las fronteras de un Estado miembro las debe tomar el Estado miembro correspondiente y no las redes criminales involucradas en el tráfico de migrantes y el tráfico de personas”, se lee en el comunicado conjunto.
La declaración se produce un día después que 15 Estados miembros de la Unión Europea hicieran un llamado público al bloque para reforzar la cooperación con los países que están en la ruta migratoria, con la esperanza de atajar los intentos de los migrantes de llegar a países de la UE.
Los países destacaron que, si bien “aceptan totalmente” la necesidad de apoyar a los refugiados sirios de conformidad con las leyes internacionales, esperan que las conversaciones puedan abrir un debate más amplio en el bloque de 27 miembros sobre el proceso de otorgar protección internacional a los migrantes.
“Lo que los ciudadanos europeos quieren de nosotros… son soluciones, soluciones prácticas y realistas que se puedan implementar”, dijo el ministro de Migración de Grecia, Dimitris Kairidis.
